En lo que respecta a preparar a los estudiantes para la universidad, las investigaciones hablan por sí solas: el apoyo de los consejeros universitarios resulta fundamental. Los estudiantes que reciben asesoramiento personalizado de un consejero universitario de la escuela, incluyendo ayuda para completar las solicitudes de admisión a la universidad y la dotación de recursos para la obtención de becas, tienen más probabilidades de ingresar a una universidad de cuatro años. Este apoyo resulta particularmente importante para los estudiantes de familias de bajos recursos y para quienes serán los primeros de su familia en ir a la universidad.
Una consejería universitaria eficaz e integral tiene muchos componentes, incluyendo el acceso a un consejero a partir de noveno grado, impulsar en toda la escuela una cultura que promueva la educación universitaria, incentivar a los estudiantes a inscribirse en clases académicamente exigentes, brindar asistencia para seleccionar a cuáles universidades solicitar admisión, encontrar becas pertinentes y otros recursos de apoyo económico, así como clases de preparación para los exámenes de admisión universitaria SAT o ACT.
Tener suficientes consejeros universitarios y académicos dedicados es fundamental para proporcionar este tipo de apoyo. No todas las escuelas secundarias tienen consejeros, y pocas cuentan con el personal suficiente para brindar la atención individual que cada estudiante necesita. Aunque la Asociación Estadounidense de Consejeros Escolares recomienda una proporción de estudiantes y orientadores escolares de 250 a 1, el promedio nacional es casi el doble, con solo 1 consejero escolar por cada 464 estudiantes (enlace en inglés).
La encuesta del Premio al Éxito Universitario 2018 de GreatSchools descubrió que el 81 por ciento de las escuelas galardonadas reportó contar con dos o más consejeros académicos que supervisaban el progreso estudiantil con vistas a la graduación y aconsejaban a los estudiantes respecto a la elección de cursos, en comparación al 49 por ciento de las escuelas que no recibieron el mencionado premio. Los resultados fueron similares para los consejeros universitarios; 33 por ciento de escuelas galardonadas reportaron contar con un consejero universitario, y un 47 por ciento reportó tener dos o más, mientras el 33 por ciento de escuelas que no recibieron el premio cuentan con un único consejero, y solo un 24 por ciento tiene dos o más.
La galardonada escuela Denver School of Science and Technology: Stapleton (video en inglés), una escuela autónoma ubicada en Denver, donde el 53 por ciento de estudiantes proviene de familias de bajos recursos, deja entrever cómo está conformado el personal en una escuela dedicada al apoyo universitario. Además de contar con dos consejeros universitarios para 523 estudiantes, hay otro empleado a tiempo parcial en el área de consejería y apoyo universitaria que ayuda a los estudiantes a buscar pasantías. Por otro lado, cada estudiante es asignado a un consejero escolar durante los cuatro años de escuela secundaria.
Creando una cultura que incentive la educación universitaria
Contar con una buena consejería universitaria es uno de los componentes para crear una cultura que incentive la educación universitaria en toda la escuela. A medida que las escuelas secundarias se esfuerzan en preparar a los estudiantes para un mercado laboral cambiante donde los títulos universitarios se vuelven una exigencia cada vez mayor, muchas escuelas se enfocan en crear un entorno donde el apoyo para la educación universitaria sea parte integral de todas las interacciones entre el personal y los estudiantes.
T.C. Gruber, maestro de ciencias en Cass City Junior/Senior High School en Cass City, Míchigan, escuela ganadora del Premio al Éxito Universitario de GreatSchools (enlace en inglés), afirma que el gran énfasis de la escuela en las oportunidades universitarias ha generado numerosas conversaciones con los estudiantes dentro del aula acerca de sus aspiraciones universitarias y profesionales. “Nuestra cultura permite que los estudiantes se sientan cómodos haciendo preguntas sobre la educación superior en todo momento”, señala.
Cass City Jr./Sr. High School tiene otra herramienta para ayudar a los estudiantes a desarrollar planes universitarios personalizados: uno de los requisitos del distrito para graduarse es que todo estudiante debe inscribirse en el seminario de último año, una clase que ayuda a los estudiantes a establecer objetivos de educación superior y desarrollar estrategias minuciosas para alcanzarlos. Aunque no todos los estudiantes de Cass City eligen un trayecto universitario, todos deben determinar y planificar la obtención del certificado o título de educación superior que necesitarán para alcanzar el éxito.
Este artículo es parte de una serie de artículos que exploran los enfoques de las mejores prácticas usadas por las escuelas ganadoras del Premio al Éxito Universitario de GreatSchools. El Premio al Éxito Universitario distingue a las escuelas secundarias de nueve estados que realizan una excelente labor en preparar a los estudiantes para alcanzar el éxito luego de la escuela secundaria. Lee más sobre el premio, ver la lista de escuelas ganadoras y lee más sobre las mejores prácticas (enlace en inglés).
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