Una triste verdad sobre la educación en los Estados Unidos es que no todas las escuelas secundarias preparan a sus estudiantes para el éxito después de la graduación. No importa qué camino tome un estudiante después de la escuela secundaria, ya sea directamente en la fuerza laboral, en el estudio vocacional o en la universidad, debe ser la elección del estudiante.

Pero cuando las escuelas secundarias no preparan a los estudiantes para un estudio más avanzado, las opciones para los nuevos graduados son limitadas. Los estudiantes que no están preparados para la universidad terminan en cursos de recuperación, pagando la matrícula universitaria para aprender cosas que se espera que los estudiantes dominen en la escuela secundaria. Otros pueden sentirse abrumados, quedarse atrás y abandonar la universidad. Si bien un título universitario no es la opción correcta para todos los estudiantes, todos los estudiantes de secundaria deben tener el derecho de graduarse de la secundaria con muchas opciones abiertas.

Hace algunos años, GreatSchools.org publicó importantes datos nuevos sobre cómo las escuelas secundarias están preparando a los estudiantes para la universidad. (Esto incluye los puntajes del examen de ingreso a la universidad y las tasas de participación, así como las tasas de graduación, las tasas de remediación, los datos de inscripción en la universidad y los datos de persistencia de la universidad). Como resultado, cambiamos la forma en que calificamos a las escuelas secundarias públicas. Ahora, nuestras calificaciones determinan qué tan bien están las escuelas preparando a los estudiantes para la vida después de la graduación más que las calificaciones de los exámenes estandarizados. En el 2018, utilizamos estos datos para lanzar los Premios College Success. Estos premios identificaron a 814 escuelas secundarias en nueve estados de los EE. UU. que están preparando a sus graduados para el éxito después de la escuela secundaria.

Aunque confiamos en los puntos de datos para identificar estas escuelas ganadoras, no nos detuvimos allí. Encuestamos escuelas ganadoras y no ganadoras para aprender más sobre lo que las escuelas ganadoras parecen estar haciendo de manera diferente.

También visitamos ocho escuelas diversas, de alto rendimiento, y ganadoras que sirven a estudiantes de bajos ingresos para comprender sus mejores prácticas. A partir de los datos de nuestra encuesta e investigación cualitativa, identificamos las siguientes seis estrategias educativas. Si tú eres un educador, padre o adolescente que busca entender o mejorar la calidad de tu escuela secundaria local, estos seis enfoques son un lugar prometedor para comenzar.

6 estrategias educativas de las escuelas secundarias galardonadas

  1. Orientación universitaria

    Cuando se trata de preparar a los estudiantes para la universidad, la investigación es clara: el apoyo de los consejeros universitarios dentro de la escuela durante los años de escuela secundaria es vital. Los estudiantes que reciben orientación personalizada de un consejero universitario de la escuela, incluida la ayuda para completar solicitudes y proporcionar recursos de ayuda financiera, tienen más probabilidades de inscribirse en una universidad de cuatro años. Este apoyo es particularmente importante para los estudiantes de bajos ingresos y otros grupos con una menor incidencia de inscripción en la universidad. Lee más.

  2. Énfasis en — y acceso a — una educación académica avanzada

    Las oportunidades de tomar cursos rigurosos y actividades extracurriculares en la escuela secundaria hacen más que aumentar los GPA (promedio de calificaciones) y agregar brillo a los currículos de los estudiantes. Es más probable que los estudiantes que toman clases avanzadas se gradúen de la escuela secundaria, se inscriban en una universidad de cuatro años, obtengan un GPA más alto mientras estén allí y se gradúen en cuatro años. Las escuelas galardonadas no solo tienen una educación académica avanzada, sino que también hacen que estas clases estén ampliamente disponibles. Es menos probable que requieran un GPA mínimo, una recomendación del maestro o cualquier otro obstáculo para acceder a ellas. Lee más.

  3. Llegar a estudiantes en riesgo

    Proporcionar a los estudiantes en riesgo un apoyo adecuado ha sido uno de los desafíos educativos más grandes e inflexibles de la nación. Cada año, uno de cada cinco estudiantes de secundaria abandona la escuela antes de graduarse, y para los estudiantes de color y los estudiantes de bajos ingresos, los números son aún más altos. Las investigaciones demuestran que los estudiantes que corren el riesgo de fracasar académicamente se benefician enormemente del apoyo adicional: desde tutorías individuales hasta servicios de asesoramiento emocional y grupos de apoyo.

    Nuestra encuesta encontró que tanto las escuelas secundarias ganadoras como las no ganadoras se dirigen a los estudiantes en riesgo para la intervención en el noveno grado, un año crucial para el éxito de los estudiantes. Pero las escuelas galardonadas llevan esto muchos más allá. Lee más.

  4. Tener altas expectativas para todos los estudiantes

    Más de cinco décadas de investigación muestran que las expectativas de los maestros afectan profundamente los resultados de los estudiantes. Usando los datos del Estudio Longitudinal de Educación del Centro Nacional para Estadísticas de Educación de 2002, los investigadores del Centro para el Progreso Americano encontraron que los estudiantes de décimo grado cuyos maestros tenían altas expectativas tenían tres veces más probabilidades de graduarse de la universidad que los estudiantes cuyos maestros tenían menos expectativas. Lee más.

  5. Fomentar los programas vocacionales y los programas de estudios universitarios por igual

    Ofrecer capacitación vocacional junto con rigurosas clases de preparación para la universidad parece ser un factor clave en qué tan bien una escuela prepara a los estudiantes para la universidad. Sorprendentemente, la encuesta de GreatSchools 2018 College Success Award no encontró que una filosofía de universidad para todos fuera un factor predictivo del éxito de los estudiantes. De hecho, las escuelas no premiadas eran más propensas (70 por ciento) a reportar tener una filosofía de “universidad para todos” que las premiadas (58 por ciento). Si bien puede parecer contrario a la intuición, las escuelas secundarias galardonadas que destacamos ofrecen una visión de cómo el éxito universitario y los programas vocacionales (que incluyen desde programas de enfermería y culinarios hasta clases de negocios y ciencias ambientales) no deben estar en desacuerdo. La mayoría de estas escuelas tienen programas vocacionales sólidos que están libres de estigmas. Lee más.

  6. Escuelas media y secundaria estrechamente vinculadas

    Muchas de las escuelas secundarias galardonadas que destacamos tenían una escuela media estrechamente conectada. No hay mucha investigación sobre el impacto de las escuelas intermedias y secundarias combinadas en la inscripción universitaria.

    Sin embargo, varios ganadores del Premio al éxito universitario de GreatSchools nos dijeron que sus modelos de sexto a doceavo grado o sus relaciones cercanas con las escuelas secundarias adyacentes eran parte de su éxito. Esto no solo les permite comunicar los mensajes universitarios antes de tiempo, sino también desarrollar habilidades académicas alineadas con el plan de estudios de la escuela secundaria. Aunque muchas escuelas secundarias no tienen la oportunidad de tener una escuela intermedia dedicada, los administradores deben tener en cuenta que la construcción de un puente académico entre la escuela media y la escuela secundaria ayuda a los estudiantes a desarrollar ambiciones para ir a la universidad y desarrollar habilidades en una edad formativa. Lee más.

Los GreatSchools College Success Awards celebran a las escuelas secundarias que tienen un historial exitoso de ir más allá de simplemente graduar a sus estudiantes ayudándolos a inscribirse en la universidad y tener éxito una vez que lleguen allí. Consulta la lista de escuelas ganadoras de premios y lee más sobre lo que aprendimos de las prácticas educativas que las escuelas ganadoras tienen en común.

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